Esta mañana, nada más llegar a las Lagunas de Lo Monte, en Pilar de la Horadada, uno de mis lugares de pajareo habituales, me he acercado al primer observatorio. Por las circunstancias del terreno, es casi imposible no hacer ruido al acercarse, así que ha sido imposible espantar a tres garzas que han salido volando nada más acercarme. Continue reading